Me ha sorprendido Caperucita Roja. Me ha sorprendido porque creía que iba a ver una crepusculiana y quinceañera adaptación del cuento de nuestra infancia, y sin embargo (o a pesar de ello), me he encontrado con una adaptación muy elaborada de Caperucita Roja, en la que utilizan gran cantidad de recursos para ser creíbles en una historia real. Es decir, salvo por el elemento "hombre lobo", (y que además éste, como en el cuento, no deja de ser una metáfora sobre un asesino y el cuidado que tienen que tener las mujeres sobre todo jóvenes a la hora de fiarse de desconocidos), salvo por ese elemento, adaptan un cuento de fantasía a una historia que bien podría haber sido real.
Es decir, el planteamiento fílmico de la historia, bien es verdad que se parece a Crepúsculo. Desde la directora del primer film de la saga vampiresca, Catherine Hardwicke, hasta la música, que aunque de compositores diferentes, hay en ocasiones que parece la misma B.S.O., pasando por el planteamiento amoroso con una mujer y dos hombres, ambos sospechosos además de ser un monstruo.
Sin embargo, nos encontramos con una película que aunque introduce elementos nuevos (como el papel del todoterreno Gary Oldman), es muy fiel al cuento, aunque la película sea realista. Y para ser realista, resuelven muy bien los misterios fantasiosos del propio cuento. Por ejemplo, cuando resuelven con un sueño la conversación más famosa entre la abuela y Caperucita ("Abuelita, que ojos tan grandes tienes..."), cuando la abuelita es el lobo, la razón por la que meten piedras en el estómago del lobo... etc.
Es verdad que frente al cuento, se toman una licencia con el personaje ya citado de Gary Oldman. Si en el cuento, el objetivo era avisar con una metáfora a las chicas de la época del peligro de fiarse de desconocidos, en esta ocasión, nos hacen reflexionar sobre la corrección o no de guiarse por la creencia de que "el fin justifica los medios".
Por último, lo mejor de la película, no es tanto cómo te desvelan el final (quién es el lobo) o cómo resuelven la historia de amor (la parte crepusculiana del asunto), sino que logran durante dos horas hacerte dudar de quién es el lobo. Y aunque yo tuve la suerte de acertar por quien aposté desde el principio, no deja de ser un mero elemento de suerte, pues aun apostando por uno, durante las dos horas dudé sobre prácticamente todos los personajes que van apareciendo como sospechosos. Eso es mantener bien la tensión y la intriga durante dos horas, si señor. O mejor dicho, si señora.
Un apunte más: ojo con Amanda Seyfried (1985), que ya ha participado en "Jennifer's Body", "Chloe", "Dear John", "Veronica Mars" y "Cartas a Julieta", está en cartelera con "In time" con Justin Timberlake, y tiene todavía pendiente para 2012 "Gone", "Gently Down the Scream", "A tres metros sobre el cielo" y un proyecto del director Mark Webber todavía sin título.
Nota: 7,5
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